Es importante en todas las personas pero resulta fundamental durante ciertas etapas como para lograr la concepción, durante tratamientos para la infertilidad y durante el embarazo
Evitar el estrés es en estos casos especialmente importante por los efectos que provoca. En el primer caso, o sea durante la gestación, afecta al desarrollo embrionario y dificulta la preparación psicofísica de la madre antes del nacimiento. Este tema fue desarrollado en el artículo sobre los Efecto del estrés en madres y bebés intraútero
Evitar el estrés es fundamental de por si en aquellas parejas que desean concebir un hijo ya que afecta en el proceso reproductivo, tanto en el hombre con la producción espermática como a la mujer en distintas fases .
En cuanto a los tratamientos de infertilidad y reproducción asistida, va contribuyendo a producir un fuerte desgaste emocional. Las largas esperas, los horarios de la medicación, los diversos estudios y ciclos que obligan a estar pendientes resultan bastante agotadores por lo que evitar el estrés o reducirlo resulta muy beneficioso.
Las recomendaciones más habituales suelen ser:
Ejercicios de relajación progresiva muscular: consiste en ir contrayendo la musculatura gradualmente desde los pies hasta el cuero cabelludo. Se tensan y luego se distienden.
Ejercicios de respiración diafragmática: son respiraciones profundas hasta llenar de aire el estómago, retener un momento y exhalar lentamente el aire. No hay que inhalar demasiado aire porque nos provocaría mareos por sobreoxigenación
Practicar la meditación: según diversos estudios, resulta sumamente positivo y relajante tanto para el organismo como para conseguir un estado de paz mental.
Ideas adicionales para evitar el estrés:
Tomarse un rato libre para darse un buen baño relajante y mimar tu cuerpo.

Escritura terapéutica
La escritura terapéutica se puede realizar de forma sencilla relatando aquellas cosas que nos preocupan. Similar a un diario, permite una «ventilación emocional», es decir poder desahogarnos poniendo en palabras lo que nos preocupa.

Masaje relajante
Darse un masaje relajante no necesariamente requier acudir a un centro especializado. También es una excelente oportunidad para dárselos mutuamente en pareja y facilitar un momento especial de encuentro y gratificante.

Un buen libro
Un buen libro de los que te cuesta dejar de leer es otra estupenda idea para mantener la mente ocupada en cosas alejadas de la realidad cotidiana. En el caso de que el estrés sea muy elevado, puede que impida la concentración en la trama de una historia. En ese caso, otra opción puede ser un libro de relatos cortos, incluso existen los «micro relatos».

Paseo
Disfrutar de paseos en contacto con la naturaleza. La simple contemplación de árboles y jardines en un parque tranquilo o en medio del campo proporciona serenidad.
También pueden ser paseos incluso bajo la lluvia que fomentan la complicidad al abrigo de un paraguas o mirando la lluvia desde una cafetería.

Paseo en bicicleta
¿Qué tal un paseo juntos en bicicleta? Hay sitios bonitos donde se pueden alquilarsi no dispones de una.

Natación
La natación es otro buen recurso para relajar cuerpo y mente. Además es un ejercicio aeróbico muy saludable.

Columpiarse
¿Te animas a columpiarte como en tu infancia? Revivir esos momentos de juego y diversión, suele ser muy gratificante.
Espero que estas ideas te resulten buenas y seguro que se te ocurrirá alguna más. Busca que se adapta a tus gustos o posibilidades y te ayude a lograr emociones y pensamientos positivos.
Liliana M. Lund